UN POEMA, de Alen Kerish


No es que cuente los días
que paso sin verte,
es que cuando te veo
me acuerdo
instantáneamente,
mecánicamente,
de la última vez
que te vi.

El muro que oculta
mi sentir,
se llama indiferencia,
y al verte cae
como cayó Berlín.

Los recuerdos
se materializan en ti
y el oscuro pasajero
que siempre me acompaña,
a veces, te reclama.

Ahora que no hay nada
que contar,
siempre me salen las cuentas
que me pide el Diablo
cuando pienso en ti.
"Un clavo siempre saca otro clavo,
pero claro, a este paso
se los vamos a tener que robar a Cristo"

ilustración de Isidro R. Ayestarán

1 comentario:

  1. siempre suelo quedarme con los ultimos versos de un poema, no se por que, pero en este caso las dos ultimas estrofas me parecen sublimes y muy definitorias del pulso que mueve a la poesia.

    enhorabuena y sigue asi. Me gusta.

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