REDENCION, de Javier Perales



Recojo los trozos rotos del suelo
Enmarco entre panes de oro estos momentos
Desde este rincón donde te recuerdo
En la más estricta y escrupulosa intimidad
¡No! Que nadie se atreva a tocarlos
Cierto es que merecen ser celebrados
Ignotos y sagrados los bienes que guardamos
Oscuridad para todos los demás
Nadie admite la culpa que abre las heridas.


"Los pecados no se redimen en las iglesias, se redimen en casas y en las calles" (Martin Scorsese)


de su poemario "Esperando al tiempo"


fotografía de Jean Jacques André

EXILIADOS, de Juanjo Galíndez



Separados por fronteras,
por frondosas carreteras,
caminando sobre el fondo,
bajo el profundo manto,
entre anchas barreras,
separados, caminando
sobre el surco del olvido,
sobre el fondo,
exiliados,
rechazados,
heridos,
separados,
huidos,
sentimientos sin viaje
ansia de vuelta,
bajo el profundo manto exiliado,
heridos,
caminando sobre el surco
del olvido,
huidos,
melancolía eterna.


de su poemario "La torre del verbo"


fotografía de Jan Saudek

DEFINICION DEL ROMANTICISMO, por The Watcher In Your Mirror



Romanticismo es
aquello que nos alimenta para el bien
y nos nutre para el mal;
la congoja que electriza
la médula de un beso...
disfonías que conforman tu agonía.

Puedes cultivar la primavera en una estrella
o imaginar un invierno
que reverbera en sus pulmones;
pero no puedes cocinar tristezas o alegrías
a la carta, sólo para sazonar
tus apariencias o tus versos.
Se siente como se siente. Y punto.
Decidme que la vida es bella
pero nunca neguéis pulsiones eróticas
en la mirada de lo mórbido,
sólo por vuestras obsesiones nictofóbicas.

¿Amor=vida?
¿Odio=muerte?
¿Estáis seguros de que no se pueden cambiar términos,
de que no surgirán incógnitas,
de que tenemos una ecuación
con verdades absolutas?
¿No puede ser que amor + odio = Amor²?
¿Te has puesto a diluir una sonrisa
en un vaso de llantos
para poder decirme
que la alegría siempre sale a flote?
¿Te crees que mis besos saben rancios
sólo porque mi alma sufra de necrosis?

¿Te atreves a probarlos?

Entonces cállate.
(¿O tienes miedo de que te muerda el corazón y tus verdades se desangren?).

fotografía de Jan Saudek

GRACIAS POR EL FUEGO (en homenaje a MARIO BENEDETTI), de Marianella


Falleció Mario Benedetti, a los 88 años, en Montevideo, y éste es mi humilde regalo, no a su muerte, sino a los maravillosos poemas y relatos que nos ha regalado. He tenido la suerte de conocerlo y escucharlo varias veces, y de haber nacido bajo el arrullo de sus versos. Mi papá, que también se llamaba Mario, me regaló el primer libro que tuve de él. A mi viejo también le doy las gracias......por el fuego.........

para Mario Benedetti:

Anoche me costó dormir
te soñé varias veces
tu guiñada cómplice
y tu sonrisa última
¿Adonde irás ahora?
dejaste un libro incompleto,
eso no se hace!
te rescataré en las dulces palabras,
en la simpleza de tu mirada limpia
en la integridad de tus pasos pequeños
en la indestructible verdad que nos dejaste.
¿Adonde estás ahora?
quería contarte:
que mi hija se llevó tu libro esta mañana,
que me lo pidió mirándome a los ojos
y lo guardó en la mochila medio abierta.
Y que te fuiste con ella,
con su pelo rojo y sus parches en la ropa,
con sus dibujos en el techo del coche
al instituto de esta ciudad al norte de España
con su rabia por el mundo que no entiende
y que el gris de la mañana
es un velo de humo
y que andan por ahí tus versos
enredados en su pecho, cobijándola.
¿Adonde irás ahora?
que todo corre por encima tuyo
que todo ocurre sin que seas testigo
ahora, que el mundo sigue igual pero un día mas viejo,
ahora que tu cansado de mirarlo cerraste los ojos.
En google ya está tu biografía
con la fecha y hora exacta de tu muerte,
seguro que no saben
que en la triste mañana Montevideana
pasean tus palabras quedándose en las esquinas
y que nunca mas te irás,
porque serás parte de las veredas y las calles
para hacerles zancadillas
a los que alguna vez de allí te echaron.
Se que no te gustan los homenajes,
y menos los póstumos,
pero quería contarte solamente
que mi hija, se llevó tu libro esta mañana.

TRILOGIA DE LA RESURECCION, de Marianella



I
Ella no salió del cascarón,
los días sucumbían y ella
repleta de otoños
vestida solamente por llevar algo suyo
por sentir el abrigo
reconoció el último grito
y se sentó.
Ella quería caminar más,
los pies guardaban recuerdos y ella
esperó.


II
Los labios azules de frío
azul del mar
reventaban de espuma
y un llanto seco, jodido
se le escapó
grito
eco
necesitaba saber
y no lloró más.


III
Tampoco recordó
ni amasó más panes
ni recogió más flores
ni ató más cabos.
Era hora de desaprender
por fin
la boca muda, sonreía.


fotografía original de Jan Saudek

MADRUGADA, de Katho



El humo de la madrugada borró tu rostro.
El agua del río llenó tus ojos de barro.
Es hora
de estar sin estarlo,
de refugiarnos
y apagar la luz.

La noche aguarda sin afán tu llegada.
Ahora decidimos.
Nos hemos ganado la libertad,
libertad que dejamos ir.

Será bueno recordar sin sed,
sin manos expectantes a la mañana,
sin buenas intenciones que finalmente serán
malas.
Sin temor.
Aquellas respuestas migrarán hacia mi
esquina
para traernos de vuelta a esta tarde.


fotografía de Jean Jacques André

LA OPERACION OVERLORD DE LOS ROMANTICOS MALDITOS


Los poetas Javier Perales, Juanjo Galíndez y Alejandro Barranquero, junto al fotógrafo Mikel Lado Peña, ponían rumbo, a principios de abril, a Normandía con el propósito de "vencer las catástofres que acontecen en nuestros días con poemas como única arma para defender la paz". Tal destino había sido un sueño para los miembros de la asociación desde sus comienzos, hace cinco años. El periplo no es sino un acercamiento a la improvisación y a la esencia de los viajes "absénticos" de los poetas franceses del siglo XIX, a través de recitales poéticos acompañados de música.
El viaje, conocido como Operación Overlord, en honor al nombre en clave que se le dió al desembarco en Normandía, ha sido para los miembros de Absenta una "forma de revivir el espíritu de la bohemia". Con influencias de los románticos franceses Rimbaud, Baudelaire o Verlaine, y de poetas americanos de comienzos del XX, como Kerouac, forman una asociación libre, que no impone cuotas ni reglas, sólo la pasión por una poesía que bebe de las influencias de lo urbano, la generación beat, el simbolismo y la experiencia. L
a asociación elabora la revista Absenta Poetas, de carácter semestral y gratuito, con una tirada de 2.000 ejemplares, y que cuenta con la participación de poetas de Cantabria, Cataluña, Galicia y País Vasco. Además, la editorial dispone de nueve libros autoeditados por sus autores, y uno nuevo en camino, "Esperando el tiempo", de Javier Perales.
Absenta Poetas combina música, teatro, poesía e imagen, y sus recitales han recorrido lugares como Lugo, Oviedo, Lisboa y, ahora, Normandía. Intentan romper con el elitismo de las grandes editoriales que maximizan sus beneficios a través de un márketing agresivo y someten a censura la voz de muchos de sus autores. Por el contrario, este colectivo coedita todas sus obras y los beneficios revierten en la propia asociación.
La próxima cita con Absenta será a cargo de Isidro R. Ayestarán, con la colaboración de Oky, que presentará el 12 de mayo su nuevo espectáculo "Muñecas de cristal" en el Café Colilla Queens de Santander.

Una crónica de Cristina Fernández Hierro aparecido en el periódico "DIAGONAL"

ABSENTA POETAS con los niños en la XXVIII Feria del libro de Santander








Los pasados 29 y 30 de abril, Marianella e Isidro R. Ayestarán estuvieron presentes en la carpa que la Consejería de Educación de Cantabria ha habilitado este año 2009 para estar presente en la XXVIII Feria del libro de Santander, realizando unos talleres creativos con niños de diversos colegios de la región. Seis grupos de alumnos, de diferentes puntos de Cantabria, que atendieron a las explicaciones de cómo se creó y en qué consiste una asociación de poetas como es Absenta Poetas. Isidro recitó diversos poemas extraidos de los libros que aglutinan los versos de todos sus componentes mientras Marianella ideó un juego participativo para todos: repartir papeletas con una frase cada una, y a partir de una puesta en común, escribir un poema entre todos los presentes. El resultado, fruto de una de las experiencias más gratificantes vividas por esta Asociación Cultural, se resume en estos dos poemas escritos por todos los niños asistentes.
En esta ocasión, los versos respiran infancia:


POEMA 29 de abril
Por las mañanas de abril,
salen flores que no dejan de salir
con el brillo del sol, qué dulce olor.
Los árboles las protegen y en abril,
aguas mil.
Silencio, que hay olas,
que hay una sombra y en las nubes
hay lluvia, y cuando abres el armario
te das un golpetazo. En la ventana se
ve un árbol con su rama,
la gente tiene sueño, un grito,
las luces en el espejo donde se refleja
el camino, donde se escucha el llanto
escrito en un libro que tropieza
con una piedra. Una niña de 4º A
se comió un bocadillo de verdura,
y su amigo le dió un beso para poder
ir al circo en una nube, para que la risa
y el agua de todo el planeta se juntaran.
Como me he portado bien,
mis papás me han regalado un caramelo,
se escuchó un grito de alegría y fui
corriendo al árbol por el camino,
y todo estaba en silencio, ardiendo
como el fuego estaba también un conejo
guardado en un armario, con un zapato
pegado al techo, y me entró la risa,
después el llanto y también el silencio.
Sentí hambre y me comí un bocadillo sin verduras
debajo de la sombra de una gran nube.


POEMA 30 de abril
Nada más despertarme,
abrí mi ventana, miré a lo lejos,
y allá en el horizonte vi un elefante
delirante, me miré en el espejo
y me quedé perplejo.
Volví a mirar y en el puerto vi un muerto
que no tenía nariz, junto al sofá,
bajo un techo, a la luz de un beso,
con su llanto acelerado, cayendo el agua
de la lluvia y en la mano una hermosa planta
como leche blanca, y me dieron un golpe
en toda la cara con una rama.
Apareció el fuego de repente y se me cayó la lente,
y para pensar me comí un caramelo
caído del cielo, y con una risa acelerada,
se apagaron las luces, me entró el sueño
y apareció un gato que me arañó un buen rato.
Aprovechando que hoy llovía, no he regado
mis plantas. Todo estaba en silencio, sólo
se oía la lluvia. Reflejado en el espejo se veía
un elefante con una enorme nariz jugando
con una piedra y un gato al lado del fuego.
Había luna llena, pero el agua seguía cayendo
gota a gota hasta el suelo. Y yo lo miraba
por mi ventana. Mi perro se dió un golpe
contra el cristal, leyendo un libro, desembarcando
en el gran puerto mientras yo soñaba con tus besos
de caramelo con sabor a leche.
Aún podemos ver el horizonte con las risas
en el placentero circo, bajo el llanto del cielo
en su techo de nubes casi sobre una rama.
Y entonces, salió el sol junto al Arco Iris.
Anoche me inspiró la luna y encendí un
fuego reflejado en mi espejo, y se creó un
gran sueño con un libro que tenía un niño.
Me di un golpe en la cabeza y se creó un gran silencio,
y comenzó a llover leche y hubo algunas risas,
y me rasqué la nariz con una rama,
mirando casi al horizonte que vi por la ventana,
y sólo el agua se oía en el completo silencio.
Y llovian caramelos que inundaron el sofá
donde había una planta que parecía una piedra,
y me dieron un beso, y toqué el techo
haciéndome sentir tan alto como un elefante,
y para celebrarlo llegó el circo con muchas luces
que iluminaron todo el puerto.
Lo único triste que había era el llanto de un gato.